Educación física
Nuestros propósitos
En la infancia, el juego es el gran protagonista de la actividad física del niño/a. A través de él, disfruta, se desarrolla, se prepara y aprende. Es el principal medio de relación con el mundo que le rodea. Es por su alto valor pedagógico, que la didáctica lo adapta como un recurso educativo.
A través del juego motriz, el/la niño/a estructura y desarrolla su psicomotricidad y su motricidad de base, pero, ante todo, es un factor muy motivador.
El movimiento resulta primordial para su óptimo crecimiento y desarrollo. Además de favorecer su estado de salud, el juego y el deporte potencian la socialización, la aceptación de normas y tolerancia, así como el trabajo en equipo, el compromiso, la superación, el respeto por el otro y el fortalecimiento de los vínculos. Todos estos valores hacen de la actividad física un potente recurso educativo.
Desde muy temprana edad procuramos estimular la conducta ética del juego, entendiendo y aceptando progresivamente el bien fundamental que subyace al deporte escolar que es la diversión y el entretenimiento.